Derretir crayones en nuevas formas podría ser la actividad artística más fácil de la historia, ¡con un resultado final realmente impresionante! FYI: esta manualidad tarda alrededor de 28 minutos
Suministros
tazón grande
agua
lápices de color
molde de silicona de corazón
agua
bandeja para hornear
guante de cocina
toalla y agarradera [opcional]
Paso 1: Remoja los
crayones en agua tibia
Ponga el horno a 350° F. Llene un tazón grande con agua muy
tibia. Sumerja los crayones en un recipiente y déjelos en remojo durante 5
minutos.
Paso 2: Pele y rompa
los crayones
Retire un crayón del agua, deslice el envoltorio de papel y
rómpalo en pedazos pequeños con las manos. Repita hasta que todos los crayones
estén listos.
Paso 3: Llene los
moldes con piezas de crayón
Rellene las cavidades del molde con piezas de crayón,
sobrellenando tanto como sea posible. ¡Tú eliges los colores!
Paso 4: hornear
moldes
Coloque el molde en una bandeja para hornear y hornee por ~
15 minutos. Echa un vistazo: si todavía ves trozos de crayones sin derretir,
los moldes aún no están listos.
Paso 5: congelar
moldes
Retire del horno y coloque directamente en el congelador. O
deje que el molde se asiente hasta que se solidifique ligeramente y luego
llévelo al congelador. Congelar durante ~ 10 minutos.
Paso 6: ¡Hazlos
explotar!
¡Esta es la mejor parte! Solo sé amable cuando saques tu
crayón de los moldes. Nota: no los deje demasiado tiempo en el congelador o
será difícil quitarles el moho. Arte